No cabe la menor duda que una de las industrias que más se alinea al desarrollo sostenible de un país, es el turismo. Y esto no es un argumento desconocido para propios y extraños, mucho menos para el actual gobierno que se ha propuesto mejorar la infraestructura de acceso a los centros arqueológicos, montañas boscosas, ríos y cañones de sorprendente belleza que tenemos a mares en el Perú. Próximamente todos estos destinos se verán favorecidos con la construcción progresiva de teleféricos en cada región andina y costera.
¿En qué consiste un teleférico?
Si bien es común verlos en Europa e incluso en países vecinos como Brasil, Chile, Argentina, Colombia, entre otros, en nuestro país por fin llegó lo que se podría decir la Era de los Teleféricos en el Perú.
Imagen referencial del Teleférico de Caracas en Venezuela. (Origen Wikipedia)
Estos vehículos de transporte consisten en cabinas con capacidad para llevar a un grupo determinado de personas, viajando suspendidos por los aires acarreados por un cable o varios cables de acero. La mayoría de estos medios de transporte funcionan por energía eléctrica y son construidos en lugares con grandes diferencias de altura, donde el acceso por carretera o ferrocarril es de muy difícil acceso.
Como es conocido por viajeros locales y extranjeros, en el Perú existe una diversidad de lugares impresionantes como lo es el Nevado de Huascarán donde se construirá en setiembre próximo un teleférico que demandaría una inversión de S/.30 millones, tal como lo informó César Álvarez, presidente regional de Ancash al diario Perú 21. Añadió que tendrá una longitud de menos de un kilómetro y permitirá el traslado de turistas que deseen esquiar o acampar.
Sin duda esta decisión de llevar al turismo a los estándares mundiales con la construcción de teleféricos contribuirá a la promoción del turismo. Uno de los lugares que ayudará muchísimo la construcción de un teleférico será en Kuelap (Amazonas) por estar ubicado en zonas de gran altura y de complicado acceso.
